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© Sydney Mohr
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© Sydney Mohr
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| Nombre | Ajancingenia yanshini | |
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Tamaño | Pequeño | ||
Era | Mesozoica | ||
Período | Cretácico | ||
Alimentación | Omnívoro | ||
Hábitat | Asia | ||
Naturaleza | Terrestre |
¿Qué es un Ajancingenia?
El Ajacingenia fue un dinosaurio terópodo oviraptórido que vivió hace aproximadamente unos 75 millones de años en lo que hoy es Mongolia, en el desierto de Gobi. Es una especie que guarda un gran parecido a las aves que conocemos hoy. Sobre todo por su pico corto y curvo, muy parecido al de un loro.
Su pico era desdentado y su cuerpo posiblemente poseía plumas. Su tamaño era como el de un perro mediano, por lo que era un dinosaurio pequeño. Era una animal veloz que podía dejar atrás a los depredadores con bastante facilidad.
Lo que se conoce del Ajacingenia es un esqueleto incompleto, que disponía de un cráneo y otros cinco esqueletos parciales, que no tenían cráneo. Inicialmente se lo llamó Ingenia. Pero el nombre se usaba para nombrar a una clase de nematodo.
Por eso en 2013 se lo renombró como Ajancingenia. Su principal diferencia con otros oviraptóridos era la forma de sus manos en las extremidades anteriores, que estaban integradas a brazos muy cortos.
Su cráneo también posee particularidades que lo vinculaban con las aves. De la misma forma en que se destacaban los oviraptóridos terópodos, disponía de un calado con una mandíbula desdentada, similar a un loro.
Hallazgo del Ajancingenia
Los restos del Ajacingenia fueron hallados en los Lechos Khermin Tsay en Mongolia. Los ejemplares que fueron rescatados de la Formación Braun Goyot ofrecían diversas partes tales como un cráneo parcial, pelvis, patas, brazos, vértebras y una cintura escapular.
La primera descripción y su correspondiente nombramiento fueron en 1981 a cargo de Rinchen Barsbold. En 2017, Gregory Funston lo clasificó como una especie de Heyuannia.
¿Qué significa Ajancingenia?
El nombre Ajacingenia proviene del mongol Ingen khoboor, que alude a la depresión Bayanhongor Aimak de Mongolia, que fue en dónde se hallaron sus restos. El epíteto yanshini se eligió en honor al catedrático, el profesor Aleksandr Leonidovich Yanshin, el científico con el que se formó su descubridor Rinchen Barsbold en el Instituto de Paleontología de San Petersburgo.
No obstante el nombre inicial Ingenia ya había sido empleado para nombrar al Ingenia mirabilis que es un nematodo tripyloidedae. Por eso su nombre se cambió a Ajancingenia en 2013 por Jesse Easter.
El sufijo ajan en mongol significa viajero y alude a la costumbre de algunos viajeros de elevar un dedo para pedir que un coche los lleve en una carretera. Esto se refiere a que posee un dedo inusualmente largo en una de sus manos.
De ahí que su nombre se traduzca usualmente viajero de yanshini.
La familia Oviraptosauria
El Ajancingenia es un dinosaurio terópodo que forma parte de la familia Oviraptosauria. Su nombre proviene del latín ovis que es huevo y de raptor que quiere decir ladrón. A esto se suma el término sauros que significa lagarto. Esto hace referencia al hecho de que eran omnívoros, cuya dieta podía incluir huevos de otras especies.
Se trataba de terópodos y por lo tanto de animales bípedos, cuyo tamaño era de pequeño a mediano. El Caudipteryx por ejemplo era tan grande como un pavo. A esto se suma el Gigantoraptor que tenía 8 metros de longitud.
Su cráneo corto y profundo, generalmente tenía un pico mayormente sin dientes. Esto lo hacía apto para una dieta omnívora u herbívora. En algunos casos a esto se sumaba una cresta conspicua en el cráneo.
Eran muy parecidos a las aves, y se cree que tenían una estrecha relación con los ancestros de las aves que conocemos hoy. Algunos especialistas piensan que eran aves no voladoras que evolucionaron a partir de ancestros que sí podían volar. Al menos algunos de sus antepasados basales poseían plumas.
Este grupo se divide en géneros primitivos como el Caudipteryx y en otros grupos como el Ovirptoridae y el Caengnathidae.
Disponían de un hocico corto y de mandíbulas profundas en forma de pico. Estas carecían de dientes. A excepción de géneros tales como Avimimus, Caudipteryx, Incsivosaurus y Protarchaeopteryx, que mostraban cuatro dientes en su hueso pre maxilar.
En ocasiones dientes más pequeños aparecían en la mandíbula superior e inferior. Tal es el caso del Caudipteryx, cuyas coronas de dientes eran como agujas. El Incisivosaurus por su parte mostró ser un heterodonte pronunciado. Tenía el primer diente de cada lado del hueso premaxilar, que estaba aplanado y extremadamente alargado para formar un incisivo
De la misma forma que sucedía con los terópodos, su cráneo presentaba múltiples ventanas. Había un ante orbital, una craneal frente a las cuencas de los ojos, una corta y una alta.
Se conocen ejemplos de espinas completas de oviraptóridos. Poseían un cuello relativamente largo con 1 a 2 vértebras cervicales más que las que usualmente poseían otros terópodos. Dado que su cola era corta, su cuello se curvaba en forma de S, permitiendo que la cabeza estuviera erguida y que mantuviera el equilibrio.
Se estima que poseía ente 12 y 13 vértebras cervicales, y que su cuello era más del doble de largo que su cráneo. También que poseía den 9 a 10 vértebras dorsales, de 6 a 8 sacras y de 22 a 32 caudales y una cola corta en relación a la mayoría de los terópodos.
Es posible que sus colas llevasen largas plumas en forma de abanico, que emplearon para cortejar a una pareja reproductiva. También tenían glándulas pituitarias profundas que se extendían a lo largo de la mitad anterior de los centros vertebrales, de dos o tres vértebras en la unión cervical-dorsal.
Los descubrimientos han ubicado a los Oviraptosauria en el hemisferio norte, en Asia y en América del Norte. Aunque se presume que algunos restos de este grupo también fueron hallados en el hemisferio sur.
Se han hallado en ecosistemas diferentes. Sus restos más comunes datan del Cretácico en Asia Central, se encontraron en rocas que indicaban un hábitat muy árido con dunas de arena. En América del Norte, los restos fósiles son más raros y aparecen en ocasiones en sedimentos depositados por los ríos en el Cretácico Superior.
Características del Ajancingenia
Sigue leyendo a continuación para conocer más sobre esta especie.
Clasificación
Los estudios taxonómicos ubican al Ajancingenia como un dinosaurio saurisquio, terópodo, de la familia Oviraptoridae, y de la subfamilia Oviraptorinae.
Descripción
El Ajancingenia era un terópodo no demasiado grande, ya que su volumen corporal rondaba los 20 kg. Poseía un cuello alargado distintivo, un pico sin dientes y una cresta ósea. Además su cuerpo era emplumado.
Aunque de su cráneo sólo se conoce una parte, es posible que mostrara una cresta plana, como otros oviraptóridos, debido a la presencia en la parte superior de un hueso lagrimal.
Sus brazos eran cortos, mientras que su mano robusta mostraba un dedo índice delgado y agrandado como una garra gruesa, el tercer dedo era corto y delgado. Su sacro disponía de siete vértebras.
Cuándo y dónde vivió
Esta especie existió durante el Cretácico de la era Mesozoica, hace unos 70 millones de años en lo que hoy es el desierto de Gobi en Mongolia.
El ambiente no ha variado demasiado desde esa era, hasta la actualidad. Era una zona muy desértica, con un clima seco muy marcado.
Es posible que estos animales se desplazaran en manadas, ya que este territorio se ha dado con grupos de otros oviraptóridos. Vivían solamente en las zonas áridas en dónde prosperaron los dinosaurios pequeños, de los que podía alimentarse.
Alimentación
Se sabe que su dieta era omnívora. Es decir que se alimentaba de vegetales y de otros animales, sobre todo de sus huevos con cáscara y mariscos.
¿Cuándo se extinguió el Ajancingenia?
La datación por carbono ubica la existencial del Ajancingenia entre los 83 a los 72 millones de años atrás. Esto lo ubica en la fase final del período Cretácico.