Fábulas de Esopo

Esopo fue un escritor y narrador de Asia menor que vivió entre los siglos VII o VI a. C. Fue esclavizado y llevado a Grecia donde trabajó para Xanto, aunque es poco lo se conoce sobre este famoso y antiguo fabulista. Sus obras se caracterizan por tener un estilo sencillo, con personajes personificados en animales que buscan transmitir una enseñanza moral o advertir sobre las debilidades humanas. Sus obras en latín y griego fueron traducidas a varios idiomas por todo el mundo y continúan leyéndose en todas partes.

Las fábulas de Esopo más conocidas

La cigarra y la hormiga

• Resumen: durante el verano, la hormiga vio ocasión para rondar los campos y llenar su dispensa de comida. La cigarra, descansando de la fatiga del sol, se burló del trabajo de la hormiga por no aprovechar el buen tiempo. Cuando llegó el invierno, la hormiga tenía bastante comida para saciarse, en cambio la cigarra, que apenas tenía que comer tuvo que pedirle a la hormiga. Esta respondió que si no hubiese sido tan perezosa y presuntuosa no le haría falta el alimento.
• Moraleja: todo trabajo es recompensado con el tiempo. No todo se trata de diversión si se quiere procurar comodidad, ni mucho menos burlarse de quien se esfuerza.

El pastor mentiroso

• Resumen: un pastor de un pueblo pequeño se aburría mientras vigilaba a sus ovejas, así que se le ocurrió una idea que le parecía divertida. Salió al pueblo corriendo y gritando que se acercaba el lobo a comerse las ovejas. Al principio, el pueblo le creyó y salió a defender el ovillo, hasta darse cuenta del engaño. Continuó con la mentira por un par de veces, hasta que un día el lobo se acercó y aunque el pastor clamaba por ayuda y aseguraba que era verdad lo que decía, ya nadie le creía.

• Moraleja: la reputación de ser mentiroso solo trae malas consecuencias. Mentir puede ocasionar muchos problemas y con el tiempo toda mentira es descubierta, además es muy difícil que un mentiroso pueda ganarse de nuevo la confianza perdida.

El lobo y el cordero

• Resumen: un día un cordero y un lobo se encontraron. El lobo intentaba explicarle al cordero que era mejor que bajara de la zona rocosa en la que estaba porque era un precipicio y, además, que en su lado había deliciosos pastales para que comiera. El cordero, conociendo al lobo, supo de inmediato que se trataba de un engaño para que el mismo lobo le cenara.
• Moraleja: se precavido con los engaños de aquellos que intentan usarte para su beneficio, es algo muy prudente que conviene poner en práctica.

La tortuga y la liebre

• Resumen: la tortuga decidió retar a una carrera a la liebre, cansada de las burlas que le hacía por considerarla lenta para caminar. El día de la competencia salieron al mismo tiempo de la línea de inicio. La liebre iba muy rápido, pero la tortuga fue lenta y constante. La liebre confiada de su ventaja, se acostó a dormir segura de que ganaría la carrera, pero cuando se levantó, por más que se apresuró, la tortuga ya había obtenido la victoria.
• Moraleja: para obtener buenos resultados hace falta constancia y paciencia. No por ir muy rápido se llega lejos.

El molinero, su hijo y el asno

• Resumen: un molinero decidió ir al pueblo con su hijo y se llevó al asno. Por cada lugar que pasaban, la gente hacia comentarios sobre los viajeros. Primero se burlaron porque tenían un asno, pero ninguno lo montaba pudiendo hacerlo. Por donde pasaban recibían comentarios por lo que el molinero y su hijo, tratando de complacer a todos, terminaron por no complacer a nadie y siendo un espectáculo para los demás.

• Moraleja: siempre vas a encontrar burla, así es que mejor tomar las decisiones por tu propio parecer sin tener en cuenta aquellas palabras ajenas que solo pretenden criticar tu trabajo.

El perro y la carne

• Resumen: un perro iba caminando campante con un trozo de carne que había recibido del carnicero del pueblo y no quiso compartirla con nadie, así que se fue lo más lejos posible para disfrutar el solo de su banquete. En el camino, se asomó a un lago y vio a un perro con un trozo de carne igual que él, solo que la carne ajena se veía más grande. El perro, envidioso, intentó de un zarpazo arrebatar la carne, abriendo su boca y soltando el pedazo que le había dado el carnicero. Lo que había visto en el lago era su reflejo de modo que al abrir la boca, la carne cayó al agua y el perro perdió su comida.
• Moraleja: la envidia y la codicia son males que con el tiempo llevan al fracaso. Alégrate siempre de tus propios logros, sin envidiar lo ajeno.

La zorra y las uvas

• Resumen: una zorra que vivía en el bosque tenía mucha hambre y después de merodear un rato dio por fin con unos deliciosos racimos de uvas. Quiso atraparlos con su hocico, pero estaban altos y tras un par de intentos no logró alcanzarlos. Se alejó orgullosamente exclamando que aquellas uvas estaban verdes y que no eran de su agrado.
• Moraleja: no se debe despreciar el valor de las cosas simplemente porque no seamos capaces de tenerlas.