Fábulas mexicanas
Las fábulas mexicanas son composiciones literarias que además de poseer enseñanzas a partir de valores y fundamentos éticos importantes para los seres humanos, tienen elementos culturales pertenecientes al país mexicano que las hacen especiales y particulares. Hay muchas fábulas que recuerdan a la historia mexicana y podemos encontrar allí a varios escritores reconocidos de este género.
Aunque dentro de las fábulas mexicanas existen algunas versiones de las fábulas clásicas más conocidas, la escritura de las fábulas mexicanas se caracteriza por varios factores dándole una vuelta para que cada enseñanza cobre sentido local manteniendo la estructura que caracteriza la fábula. Es así como estas fábulas conservan siempre una moraleja o enseñanza de carácter moral y cuyos personajes son casi siempre animales u objetos con características humanas.
Las fábulas mexicanas más conocidas
Los elementos que poseen las fábulas hacen referencia a la cultura y a la forma de cada país y algunos escritores mexicanos se han destacado en la narrativa literaria. Ellos son: José Joaquín Fernández de Lizardi, a quien se le empezó a llamar como “el pensador mexicano”, José Rosas Moreno que le conocían en varios círculos académicos y literatos como “el poeta de la niñez” y la gran poetisa y fabulista mexicana Rosa Carreto, entre otros.
La retórica que busca predicar lecciones de vida por excelencia son las fábulas. Algunas fábulas mexicanas antiguas son muy difíciles de datar, dado que su historia fue limitada, sin embargo, la tradición oral mexicana y la idiosincrasia de un pueblo avanzaron sobre un pasado milenario en el cual las fábulas mexicanas no se quedaron atrás. Es por ello que los grandes fabulistas mexicanos que conocemos son todos de la época moderna. Igualmente las fábulas mexicanas, como todas las fábulas, generan gran empatía con los lectores y les enseñan valores a seguir.
Las fábulas mexicanas comparten muchas similitudes con los demás tipos de fábulas, lo que las caracteriza es la inclusión de algunos elementos que son cotidianos y algunas formas de redacción que pueden ser más amigables para los niños y las niñas mexicanos, sin embargo, podemos disfrutarlas en todas las partes del mundo por su genialidad e inventiva. Te invitamos a leer más fábulas y podrás conocer alguna que te llame la atención.
No importa el país en el que te encuentres, sigue leyendo y aprende sobre fábulas mexicanas.
El tigre hipócrita y el leopardo
- Autor: José Joaquín Fernández de Lizardi
- Resumen: un tigre se engrandecía a menudo y a todo el mundo decía de sus buenas intenciones. Indicaba que era un gran piadoso que de los desdichados se acordaba, y así lo oyó un leopardo que por allí pasaba. Le preguntó entonces que hacía él ante las desdichas de los demás y el tigre, con el rabo en las piernas, contestó que nada.
- Moraleja: hay que evitar ser como aquellos que viven de habladurías y dicen compadecer cuando en realidad poco aportan. Es de hipócritas mucho hablar, pero a la hora de la verdad no hacer ni aportar nada.
La tortuga y la hormiga
- Autor: José Joaquín Fernández de Lizardi
- Resumen: la tortuga comentaba a la hormiga qué muy plácida se veía comiendo sus semillas, trigo y demás durante el invierno, y luego agregaba que pobre de ella que a duras penas se alimentaba de alguna lagartija de vez en cuando. Ante esto la hormiga le respondió que en verano estuvo recopilando todo su banquete, y le preguntó a la tortuga que qué hacía ella mientras. La tortuga respondió que rascarse la panza y fue ahí, cuando se dio cuenta que, por eso mismo, ahora pasaba hambre.
- Moraleja: quien no trabaja y se esfuerza por su bienestar puede vivir momentos de penuria por no asegurarse su fortuna. Quien está prevenido está mejor protegido.
El ruiseñor y el cuervo
- Autora: Rosa Carreto
- Resumen: En cierta ocasión, a petición del rey de los animales, hubo un concurso para ganar el puesto de mejor músico y cantante. Se presentaron varios animales, entre ellos el ruiseñor e, inesperadamente y a última hora, se inscribió el cuervo. Llegado el momento, el ruiseñor cantó hermosas melodías que maravillaron. Después siguió el cuervo que apenas dio un par graznidos. Se hizo la votación y se dio el veredicto determinando que era el cuervo el mejor cantor. Todos sorprendidos después entendieron que el cuervo era gran amigo del jurado.
- Moraleja: muchas veces se desaprovechan grandes talentos por corrupción y amiguismo.
El traje que escogió el charro
- Resumen: en una feria, a las afueras de una ciudad de México, todo el pueblo se preparaba para el gran evento. Los trajes también se preparaban para que viniera el charro y escogiese el mejor. Tres trajes competían entre sí para saber cuál era el favorito. El primero dijo que sería escogido por sus brillantes, el segundo por sus maravillosos colores y el tercero por su calidad. Cuando llegó el charro a escoger su traje, para sorpresa de todos, eligió un cuarto traje había permanecido callado y que sin duda para el charro era el más bonito.
- Moraleja: cada quien tiene su propio valor y se destaca por sus particulares habilidades. No trates de darte valor pisoteando a los demás.