La atención en clase
La atención en clase: Consejos para profes.
Si eres profesor de Educación Infantil sabes que la capacidad de los niños para prestar atención es limitada. Te proponemos a continuación algunos consejos para mantener la atención en clase de los más pequeños y para crear clases dinámicas que nunca, nunca le aburran.
8 consejos para que el alumno mantenga la atención en clase.
1. Pensar en muchas actividades para un mismo día.
Los niños de cuatro años, por ejemplo, se aburren con mucha facilidad y necesitarán pasar de una actividad a otra con más rapidez y frecuencia de la que te imaginas.
Para mantener la atención en clase de los más pequeños necesitarás pensar en muchas actividades que realizaréis en el mismo día.
2. Pensar en actividades variadas.
Algunas actividades motivarán a los niños a levantarse de la silla y hacer ejercicio, otras les motivarán a pintar, otras a leer y escribir… el niño necesitará actividades variadas que le enseñen todo tipo de habilidades, pues lo más probable es que los niños de tu clase tengan diferentes preferencias y al proponer actividades variadas te asegurarás de que cada niño haga por lo menos una actividad que le encante.
3. Actividades divertidas.
Si los niños están aprendiendo a contar en inglés, ¿crees que les gustaría dividirse en grupos de tres y jugar a los bolos, contando del uno al diez hasta que el alumno lance la bola, y luego contando el número de bolos que siguen en pie? Este juego no sólo servirá como un repaso de los números sino que también les mantendrá muy entretenidos, pues harán ejercicio y no se aburrirán.
4. Que participen, y mucho.
Es menos probable que un niño se aburra si está involucrado en la clase y participa en cada una de las actividades. El profesor necesitará pensar en actividades que involucren a cada uno de sus alumnos para que de esta manera ninguno pierda la atención en clase ni el interés.
5. Pegatinas a cambio de un buen comportamiento.
Cada niño recibirá una pegatina al final del día si se ha comportado bien durante todo el día. El alumno que no haya prestado atención en clase, que haya hablado con sus compañeros mientras el profesor estaba hablando o que se haya levantado de su asiento sin el permiso del profesor no recibirá una pegatina al final del día. El profesor puede hacer un cartel con el nombre de todos los alumnos de la clase y, al lado de cada nombre, colocar las pegatinas una a una cada día, hasta formar varias filas horizontales. Cada semana, el primer niño en completar su fila con pegatinas recibirá un premio. Este juego motiva a los niños a portarse bien porque les encantará las pegatinas del profesor que, a ser posible, tendrán animales como dinosaurios y muchos colores.
6. El grupo que más atención preste.
Divide la clase en cuatro grupos (a ser posible con el mismo número de alumnos por cada grupo). El grupo que mejor se porte durante toda la semana recibirá un premio el viernes por la tarde.
Este juego motivará a todos los niños a portarse bien para que su grupo reciba el premio tan ansiado, al mismo tiempo que motivará a cada alumno a aconsejar a los demás que presten atención, permanezcan en su asiento y se porten bien desde el inicio de la clase hasta el final.
7. Los niños sabrán qué se espera de ellos.
Para que un niño no pierda la atención en clase y se porte bien necesitará saber qué espera su profesor de él. ¿Cómo debe comportarse? Deberá comprender las expectativas del profesor antes del inicio de la clase.
8. Habrá organización.
El profesor fijará una rutina diaria y se asegurará de que ningún día esté permitido levantarse del asiento sin permiso, o hablar sin antes levantar la mano y esperar a que el profesor le dé permiso para hablar.