Destino: la obra de arte animada de Disney y Dalí
Para todos nosotros, Salvador Dalí y Walt Disney son un claro ejemplo de genialidad. Los dos recorrieron gran parte del siglo XX y alcanzaron el éxito cada uno en su ámbito, pero lo que mucha gente no sabe es que un día sus caminos se cruzaron y forjaron una amistad que les llevó a trabajar juntos en un proyecto muy especial.
¿Quieres saber en qué consistía? Enseguida lo descubrirás. Antes te invito a que conozcas algunos datos interesantes sobre sus vidas y su contribución a la cultura artística y popular.
¿Quién fue Salvador Dalí?
¡Casi todo el mundo reconoce a Salvador Dalí! Su aspecto estrafalario, sus largos bigotes y su comportamiento extravagante, le convirtieron en un icono de la cultura contemporánea en todo el planeta ¡No quería pasar desapercibido y vaya si lo consiguió!
Pero esto no debe hacernos olvidar que está considerado uno de los artistas más importantes del siglo pasado y que sus cualidades artísticas eran innegables. No sólo fue pintor, sino también escultor, dibujante, grabador, escenógrafo…
Nacido en Figueres (España) en 1904, demostró desde muy jovencito una imaginación fuera de serie y una grandísima habilidad para el dibujo. Vivió durante años en Madrid, donde estudió Bellas Artes y empezó a exponer sus primeros trabajos, y después en París.
Fue amigo de los intelectuales y artistas más importantes de su tiempo, como el poeta Federico García Lorca, el director de cine Luis Buñuel o el genio de las artes Pablo Picasso, y se convirtió en la figura más conocida del movimiento artístico llamado Surrealismo, surgido en la década de los años veinte.
Dalí y el Surrealismo
Piensa un poco en tus propios sueños… ¿Verdad que mientras duermes vives historias que te desconciertan porque mezclas recuerdos y personas que no se conocen entre sí? ¿Y a que en ellos te suceden cosas asombrosas, aparecen seres fantásticos, objetos extraños y te mueves por lugares que son pura ficción?
Pues imagínate que una mañana, al despertarte, decides pintar todo eso que has soñado ¡Seguro que el cuadro sería algo así como un caos de imágenes a medio camino entre la realidad y la fantasía!
Esto es en gran parte lo que los pintores surrealistas trataban de reflejar en sus pinturas: el mundo de los sueños y de los pensamientos escondidos en lo más profundo de la mente que uno no puede controlar.
¿De qué manera lo plasmó Dalí? Pues lo hizo creando extrañas imágenes que, aunque casi siempre son reconocibles, no aparecen de manera realista porque se alargan, se deforman, se derriten o se mezclan unas con otras para crear figuras fantásticas y paisajes alucinantes.
Una de sus obras surrealistas más importantes es La persistencia de la memoria. En ella los relojes parecen fundirse como el queso y la asociación de imágenes es sorprendente, irreal, como si estuviéramos viendo un sueño pintado.
Además, sus cuadros esconden muchísimas cosas que no se ven a no ser que nos paremos a observarlos con detenimiento. Compruébalo tú mismo en la obra llamada Cisnes que se reflejan como elefantes ¡Te sorprenderá descubrir unas cuantas imágenes camufladas que no son lo que parecen! ¿O sí lo son?…
¿Quién fue Walt Disney?
¿Quién no ha visto dibujos animados de Mickey Mouse o los clásicos de Disney como Alicia en el país de las maravillas, La Cenicienta, Dumbo, La Bella Durmiente, Bambi…?
Todas estas producciones nacieron de la imaginación de Walt Disney, quien partiendo de cero y a base de mucho esfuerzo, logró crear la compañía de animación más importante del mundo.
Disney nació en la ciudad de Chicago (Estados Unidos) en 1901. Ya desde pequeño adoraba dibujar y sentía fascinación por el cine, así que no tardó en descubrir lo que quería hacer en su vida: crear personajes, inventar historias y dirigir películas.
Durante años trabajó para conseguirlo y gracias a su creatividad y buen olfato para los negocios, logró su meta: en 1923, cuando tenía 22 años, fundó una pequeña empresa que pocos años después se convirtió en la productora de las películas animadas más aclamadas del cine.
Su primer personaje famoso, Mickey Mouse, debutó en la gran pantalla en 1928 como protagonista de la primera película sonora de dibujos animados de la historia: Willie en el barco de vapor. Como ves, Disney fue también pionero en el campo de las técnicas de sonido porque hasta muy poco tiempo antes, todas las películas eran mudas.
A partir de ahí creó nuevos proyectos y por fin pudo producir el primer largometraje (película larga) de dibujos animados de la historia del cine: la adaptación del cuento clásico Blancanieves y los Siete Enanitos (1937), que tuvo un enorme éxito. Después vinieron todos los demás que seguramente has visto un montón de veces y que le dieron fama mundial.
Su mente siempre estaba dándole vueltas a ideas originales y muy innovadoras. Un día se animó a llevar a cabo una de las más espectaculares: la creación del mayor parque temático del mundo. Lo diseñó a su gusto y planificó personalmente las increíbles atracciones hasta el último detalle.
El resultado fue la mágica Disneylandia, inaugurada en 1955 en California.
¿Cómo se conocieron Disney y Dalí?
Mucho antes de hacerse amigos ambos genios ya se admiraban mutuamente y era cuestión de tiempo que un día se encontraran.
En 1944 Dalí estaba viviendo con su esposa Gala en Estados Unidos. Por aquel entonces, Disney leyó un libro sobre la vida del pintor y decidió enviárselo a su casa para que se lo firmara. Has entendido bien: ¡le pidió un autógrafo!
Dalí, muy amable, aceptó, y a partir de ese momento, comenzaron a escribirse cartas. Un año después, coincidieron en una fiesta en Hollywood y se conocieron en persona.
Los dos genios deciden unir su talento
A Disney le gustaba mucho la pintura. Por su parte, Dalí era un fanático del cine y hasta había diseñado decorados para algunas películas ¡Estaba claro que tenían muchas cosas en común!
Como se llevaban de maravilla y les apetecía trabajar juntos, decidieron crear un novedoso cortometraje que uniera el arte y el cine de animación.
Llegaron a un acuerdo que en principio pintaba muy bien: Dalí haría los dibujos y trabajaría en el guion, mientras que Disney pondría a su disposición la tecnología más avanzada del momento. El resultado debía ser algo nunca visto, una obra asombrosa y vanguardista que dejara a todo el mundo boquiabierto.
¡Dalí estaba entusiasmado! Se inspiró en una preciosa canción interpretada por la cantante Dora Luz llamada Destino y decidió que ése sería el título de la película.
Trabajó mano a mano con John Hench, un creativo de la compañía para desarrollar el argumento: la historia de amor imposible entre Chronos, personificación del tiempo, y una mujer de carne y hueso.
Durante meses realizó decenas de bocetos, dibujos y pinturas que aún se conservan y el equipo técnico, con parte de este material, grabó los primeros 18 segundos de la película.
Cuando todo parecía ir sobre ruedas sucedió algo inesperado: ¡el proyecto se canceló!
El negro destino de Destino
¿Qué pudo pasar para que Disney y Dalí rompieran su contrato y dejaran el trabajo a medio hacer?
Según algunos, Disney y Dalí se enfadaron porque cada uno quería contar la historia de una manera diferente y no conseguían ponerse de acuerdo.
Otros piensan que fue porque la compañía estaba pasando una mala racha económica tras la Segunda Guerra Mundial y Walt Disney no tuvo más remedio que recortar gastos.
El caso es que desgraciadamente, aunque Dalí y Disney mantuvieron su amistad, el proyecto se guardó en un cajón, cada uno siguió su camino y jamás volvieron a trabajar juntos.
¡El proyecto resucita!
Un día, casi sesenta años después, Roy E. Disney, sobrino de Walt Disney, se acordó de la gran idea que su tío y Dalí habían dejado en olvido y decidió terminar el trabajo.
Recopiló las dibujos que había hecho el pintor, los textos que se habían escrito y toda la información que pudo ¡Quería respetar al máximo la idea original!
Después, puso a trabajar a un gran equipo de especialistas que utilizaron los 18 segundos que había grabados y completaron minuciosamente la película utilizando los métodos tradicionales de animación combinados con la avanzada tecnología actual.
El resultado
El resultado fue un magnífico cortometraje de unos seis minutos que nos transporta al mundo simbólico y mágico de la pintura y los sueños de Dalí, pero con ese aire y estilo Disney tan reconocible.
Se estrenó en el año 2003 con gran éxito de la crítica, recibió muchos premios importantes y fue nominada al Oscar.
¿Te apetece ver Destino?
Nunca sabremos qué pensarían el gran Walt Disney y el genial Salvador Dalí si hoy en día pudieran ver su proyecto terminado, pero posiblemente se sentirían orgullosos y muy emocionados.
Por suerte, tú sí puedes disfrutarlo. Es una historia difícil de entender, pero no te preocupes porque se trata de que te empapes de la belleza de las imágenes y te dejes llevar por la hermosa canción que las envuelve.
Por cierto, presta atención porque vas a poder ver los 18 segundos originales que se grabaron en 1946: es la parte en la que aparecen dos tortugas ¿Serás capaz de descubrirlas?